Mediación obligatoria en tiempos de crisishacia una «nueva» fórmula de administrar —y garantizar— el derecho a justicia

Resum

El Anteproyecto de Ley de Impulso a la Mediación puede suponer una oportunidad de tránsito de un sistema tradicional de (administrar) justicia —articulado hasta ahora a través de la tutela jurisdiccional y cuyas debilidades, que no fortalezas, se han visto acentuadas con la crisis del COVID-19—, hacia una fórmula extrajudicial de procurar la garantía del derecho a justicia como es la mediación. Si bien su existencia no es algo nuevo, sí lo es, en cambio, la obligatoriedad con la que se pretende implantar este cauce en determinadas materias, constituyendo así un requisito de procedibilidad para, en su caso, ejercitar el alternativo y posterior derecho de acción